viernes, 1 de noviembre de 2019

Dinosaurios en el Condado de Treviño.

Hace 70 millones de años la configuración del continente europeo era muy diferente de la actual. Aunque Europa comenzaba a ser reconocible, los Pirineos aún no eran visibles y permanecían bajo el mar, casi como pequeños promontorios. Debemos imaginar por tanto a Europa como un archipiélago compuesto por muchas islas de diversos tamaños.

 

Casi coetáneos de los dinosaurios más famosos, Tyrannosaurus o Triceratops; los dinosaurios del Condado de Treviño no eran de tan enorme tamaño, los más grandes no superaban las 5 toneladas.

El objetivo de este programa titulado “Dinosaurios en el Condado de Treviño”, es acercarnos a uno de los yacimientos que nos muestran como eran esos dinosaurios y la fauna que los acompañó en tierra firme y en los mares.



jueves, 1 de agosto de 2019

La Casa de los Fósiles.

La mayoría de las entradas que he realizado en el blog sobre paleoturismo, tienen como protagonistas a los grandes museos e impresionantes yacimientos al aire libre que muestran fósiles relacionados con criaturas de tamaños imponentes. Pero el turismo con la paleontología como protagonista puede ser también sorprendente fuera de un museo, y con criaturas muy comunes en el registro fósil como “artistas” principales.

Entrada de la primera casa.
Eso es lo que sucede en la modesta localidad de Bóveda, en Álava. El folklore entorno al mundo de los fósiles es muy rico en la norte de la Península Ibérica, y concretamente en esa zona de Álava y Burgos cuenta con interesantes “leyendas”.

Recuerdo que en una ocasión al visitar el pueblo de Contrasta, Álava, mostré a un vecino un fósil que deposité en su mano. Mientras lo tocaba y movía entre sus manos me advirtió que aquella “piedra”, redonda y con una estrella en su superficie, era un “rayo”. Su mirada era el reflejo del convencimiento de quien se cree en poder de una verdad evidente, ¿Pues que podía ser aquello salvo el resultado del impacto de un rayo? La otra opción era que se tratara de un erizo de mar fosilizado hace más de 100 millones de años, y decir eso a escasos 45 km de Vitoria podía parecer ridículo. Esa fue mi propuesta, pero aquel vecino estoy convencido que no cambió de opinión y se marchó pensando que aquel urbanita estaba algo loco.
 
Detalles en la primera casa.
Y cuando uno entra en los pueblos y habla con la gente sobre ese pasado remoto, y el testimonio fósil que inunda sus campos. No solo recoge leyendas y sorprendentes explicaciones, también se encuentra con tesoros tangibles bañados también por ese folklore. Bóveda es un pueblo que cuenta con 66 habitantes (datos 2017), y cuenta con 2 casas decoradas con fósiles.

La primera está en la carretera principal por la que se accede al pueblo, la decoración es escueta y se reduce principalmente a bivalvos y ammonites colocados de forma simétrica en la puerta principal de la casa. Como digo son pocos los fósiles que la decoran, pero la calidad de los mismos es muy buena.

Más escondida pero con una cantidad asombrosa de especímenes, está la segunda casa en el interior del pueblo; llamada "La cabaña de los fósiles". Quizás el visitante que decida acercarse al pueblo tenga que preguntar a algún vecino, o probar suerte perdiéndose por las calles de Bóveda.
Corales, ammonites, gasterópodos, bivalvos… colman las fachadas, la entrada principal y los bancos del exterior de la casa.
A la izquierda fotografía de las fachadas de la casa, con detalles de bibalvos y corales.

Sin duda, recomiendo la visita e invito al civismo, porque si entre todos cuidamos de nuestro patrimonio, las futuras generaciones podrán también disfrutarlo.

No he querido incluir más fotos de la "cabaña de los fósiles", con el deseo de que quien acuda para verla, pueda maravillarse con los detalles que la componen.


Autor texto: Germán Zanza López.
Fotografías: Germán Zanza López.



domingo, 28 de julio de 2019

Murciélagos junto a neandertales.

Las especies de murciélagos conocidas que habitaron en la Península Ibérica durante el Pleistoceno, eran las mismas que hoy en día; animales de pequeño tamaño y de hábitos nocturnos. Con una esperanza de vida de 15 años, en algunos casos llegando incluso hasta los 35 años y una tasa de natalidad de una cría por año. Si a todo esto le sumamos que son mamíferos voladores muy ágiles, sin apenas depredadores, y que hibernan, la esperanza de encontrar sus fósiles lejos de las cuevas se reduce drásticamente.

Izq. Angélica Torices, Dcha. Julia Galán.
Paradógicamente sabemos donde buscar sus fósiles y en los yacimientos donde aparecen suelen encontrarse en abundancia. Julia Galán García, es una entusiasta de estos maestros del vuelo, una científica especialista en un grupo poco estudiado en nuestro país, y es que en el mundo de la paleontología todo, o casi todo, es ensombrecido por la figura de los dinosaurios.

Sin embargo en paleontología no todo son enormes huesos, y para estudiar a los murciélagos que vivieron con los neandertales, hay que “tirar” de microscopio. Solo así, podemos apreciar todos sus detalles y determinar a que especie pertenece cada resto fósil.


Es así como sabemos que los murciélagos que pudieron ver los neandertales hace 50.000 años en cuevas como las del Cerro del Pezón de Aguilón (Zaragoza), eran especies idénticas a las que podemos contemplar hoy en día. Y eso nos debe de sorprender, ya que en aquel tiempo la fauna que en general poblaba nuestro país era muy variada y diferente a lo que podemos ver hoy en día. Es interesante por ello, saber que los murciélagos, los únicos mamíferos adaptados al vuelo, apenas vieron modificada su morfología y que las especies presentes en aquel tiempo, sobrevivieron a los brutales cambios de temperatura.

Los fósiles más antiguos de quirópteros se encuentran en América, y datan de hace 55 millones de años. En España no tenemos fósiles tan antiguos y nos tenemos que conformar con fósiles de aproximadamente 25 millones de años. El vuelo del murciélago, por lo tanto continúa siendo un enigma, pues los fósiles más antiguos presentan formas anatómicas análogas a las actuales y no hay registro fósil que muestre su “evolución”. Parece que la adaptación del murciélago, fue rápida y en un entorno que no debió de favorecer la conservación de sus frágiles huesos. Aunque es fácil imaginar a un pequeño animal similar a una comadreja saltando de árbol en árbol y adaptando sus manos, cada vez más grandes, a un planeo entre árboles que acabó dotando de alas a este magnífico animal.

Algunos fósiles de quiróptero de Aguilón.

Los curiosos deberían aprovechar las noches urbanitas de verano y contemplar durante unos minutos el haz de luz de las farolas, pues podrán ver una sombra del pasado, el vuelo de una criatura enigmática, que lejos de ser un ratón, tampoco es ciego.


Autor texto: Germán Zanza López.
Foto charla Murciélagos "La evolución de los señores de la noche": Germán Zanza López.
Foto fósiles de Aguilón: Galán et al. 2015. Fossil bats from the Late Pleistocene site of the Aguilón P7 Cave (Zaragoza, Spain).
Fuentes: 
- Galán et al. 2015. Fossil bats from the Late Pleistocene site of the Aguilón P7 Cave (Zaragoza, Spain).